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En
un acto desde el Salón de las Mujeres Argentinas del Bicentenario la jefa de
Estado anunció por cadena nacional la decisión de subir el mínimo no imponible
de ganancias.
La
Presidenta indicó que la medida se aplica desde el 1 de marzo y que con este
incremento el mínimo no imponible se eleva a $ 8.360 para el caso del
trabajador soltero y a $ 11.563 en el caso del trabajador casado con dos
hijos.
Con
este anuncio la mandataria indicó que el 82,52% de trabajadores y monotributistas
queda exento del pago de este impuesto que sólo será tributado por el 17,48% de
los trabajadores
Indicó
que con esta medida el erario público sacrificará $ 8.000 millones que recibía
por el impuesto a las ganancias.
Reclamó
a representantes gremiales trabajar en "forma racional para sostener este
crecimiento y esta inclusión".
La
Presidenta sostuvo que el aumento del mínimo no imponible se aplica desde
el 1 de marzo y que con este incremento el mínimo no imponible se eleva
a $ 8.360 para el caso del trabajador soltero y a $ 11.563 en el caso del
trabajador casado con dos hijos.
El
acto comenzó con la entrega a empresarios de 55 certificados de créditos del
Bicentenario por 976 millones de pesos, con los que suman con los ya otorgados 11
mil millones de pesos y traccionan una inversión total de más de 17 mil
millones de pesos y un generación de 32 mil nuevos empleos.
Destacó
que a partir de ahora los créditos del Bicentenario “se orientarán cada vez más
a lo estratégico y estructural” porque “estamos trabajando más quirúrgicamente
con sintonía fina”.
“Quiero
que haya más rentabilidad, pero que le pongamos competitividad”, subrayó.
Al
destacar la ayuda que se aporta a los empresarios con los créditos blandos que
otorga el Estado, pidió como contrapartida “un compromiso para mejorar la
competitividad y no enfrascarse en la pelea por la distribución del ingreso”,
por lo que hizo una “recomendación” a los “dirigentes sindicales” que aporten
“racionalidad” en las discusiones salariales, teniendo en cuenta que en el
último trimestre del año se ha logrado bajar el desempleo a un 6,9 por ciento,
cuando en el mundo desarrollado los índices superan los dos dígitos.
“La
presencia del Estado sosteniendo el trabajo, el consumo, el mercado interno, el
crédito, los trabajadores es para asegurar la demanda”, agregó.
Anunció
entonces la decisión de aumentar el mínimo no imponible de los trabajadores de
la cuarta categoría en un 20 por ciento a partir del 1 de marzo próximo, lo que
significa “para el erario público un sacrificio fiscal de más de 8 mil millones
de pesos”.
De
esa forma no tributarán los trabajadores solteros que cobren hasta 8.360 pesos
por mes y los casados con hijos que perciben hasta 11.563 pesos. Mañana,
anticipó, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, aportará los detalles de la
medida.
Indicó
que con el aumento, “solamente van a tributar el 17,48 por ciento de los
trabajadores con más altos ingresos, y casi el 83 por ciento no va a tributar”.
Al
poner como ejemplo los montos que ello representa para el bolsillo de los
trabajadores, precisó que los que ganan 8.400 pesos aportarán al fisco 3
pesos mensuales, lo cual es “menos de lo que cuesta el pasaje de subte, que se
elevará a 3,5 pesos”.
En
ese sentido, adelantó que “tendremos que discutir con la Ciudad el tema de los
micros con origen y terminación en la capital, que por ley han sido
transferidos y de los que no quieren hacerse cargo”.
También
pidió “a todos los gobernadores, los jefes de Ciudad, los intendentes que
pongamos todos un poco de cordura, porque la inflación no es un fenómeno de la
naturaleza ni biológico, sino que contribuyen a ella todos los sectores”.
“Este
gobierno –dijo- no aumentó ningún impuesto, está percibiendo menos impuestos,
y pido a los gobernadores e intendentes que contribuyan, no con discursitos,
contra la inflación, con actos de gobierno para que realmente podamos ser
competitivos”.
También
señaló que “escuché algunas cuestiones de los trabajadores, referidas al 20 por
20 como si dependiera de la suba o la baja si hay un 82 por ciento de los
trabajadores que queda afuera del impuesto a las ganancias, no puede ser que
las paritarias se hagan en base a un 17 por ciento (de los que tributan ese
impuesto), es absolutamente ilógico”.
“La
otra cuestión –continuó- es la rentabilidad; un gremio muy conocido, el
bancario” que en las paritarias “puede presionar y tiene rentabilidad
asegurada, pero hay que discutir muy en serio la rentabilidad y la
competitividad y saber que tenemos que contribuir todos a este proceso virtuoso
“.
Al
destacar la reducción alcanzada en el nivel de desocupación, sostuvo que
“nosotros tenemos que trabajar, empresarios, trabajadores y Estado, en forma
racional para sostener este crecimiento con inclusión social” y “los que tengan
ambiciones políticas” que “no utilicen a la economía y a sus representados para
lograr cosas que de otra manera no lograrían”.
“Pido
ojo, que esta presidenta, y el que no está más, el mejor presidente que tuvo la
Argentina en los últimos 50 años, y el mejor que tendrá en las próximas
décadas” que viabilizó las paritarias libres “que vamos a seguir sosteniendo a
rajatabla” que en sus negociaciones “sean absolutamente racionales” por cuanto
“ni los empresarios deben apoderarse de la renta que no les corresponde, ni los
trabajadores deben pretender una negociación salarial que termine impactando en
los otros trabajadores, porque el empresario que aumenta el sueldo lo pone
luego en los costos y éstos los pagan los trabajadores que están en la
informalidad”.
Anunció
luego el incremento por la movilidad jubilatoria que a partir del 1 de marzo
será del 15,18 por ciento.
Mencionó
luego el caso del gobierno de Córdoba, que hizo un reclamo judicial para “no
pagar un bono del ANSES” y obtuvo una medida cautelar de la Justicia, tras lo
cual “se dio cuenta que en todos los títulos de la deuda se arrastraba el
default técnico” entonces “cuando vio que se defaulteaba toda la deuda que
tenía, dijo que iba a pagar”.
“Me
preocupa –puntualizó la Presidenta- más que haya hecho la medida judicial, que
no supiera” en qué iba a redundar ese reclamo.
“Pido
encarecidamente a los señores jueces de mi país” que “hay que poner coto a las
cautelares” porque en algunos casos “entorpecen y pueden descalabrar
económicamente a un país”, sostuvo.
Por
eso solicitó a gobernantes y jueces que “me ayuden a seguir sosteniendo a la
Argentina” para que “el país siga adelante y que nunca más tengamos que vivir
lo que nos tocó vivir a nuestra generación”.
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