La
fuerza policial recomienda no perder la calma, pese a las amenazas o intentos
por obtener dinero, y no dar ningún dato personal, como los son números de
documentos o tarjetas de créditos, que se reciban mediante este tipo de
llamados.
Para
tener en cuenta:
Es
importante estar alerta y rechazar comunicaciones de unidades carcelarias,
siempre que no se tenga un familiar detenido y que pretenda tomar contacto con
usted.
Hay
que cortar las llamadas con avisos sobre accidentes de tránsito que pudiere
haber sufrido algún familiar. Este tipo de sucesos es informado personalmente
por efectivos policiales.
Si
el desconocido confirma un secuestro, hay que tratar de ubicar rápidamente al
familiar mencionado.
Siempre
hay que denunciar los hechos al 101 o al 0810 888 3368. No se debe intentar
negociar.
Teniendo
en cuenta que hay “secuestradores virtuales” que solicitan tarjetas
telefónicas, hay que usar el sentido común para advertir que un rapto es un
delito demasiado complicado como para que se pida este tipo de recompensa.
Para
evitar divulgar datos personales no llenar cupones de origen desconocido.
Tampoco hay que agendar en los celulares contactos como papá, mamá, etc. Es más
prudente utilizar los nombres de las personas, por las dudas sea extraviado o
robado el aparato y caiga en manos inescrupulosas.
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